Nuestra salud intestinal afecta muchas funciones corporales, incluyendo el metabolismo. De hecho, esta conexión es tan real, que cuanto más saludable sea nuestro intestino, más fuerte será nuestro metabolismo.
Aquí es donde entran en juego las manzanas. Las manzanas tienen aproximadamente cien millones de bacterias, además de mucha fibra fibra, lo cual es clave para la salud intestinal. La fibra alimenta a nuestras bacterias intestinales.
Algo que probablemente no sabías es que hay cerca de cien tipos diferentes de fibras, y necesitamos diversidad para tener una salud intestinal en buen estado. Las manzanas tienen al menos ocho tipos diferentes de fibras, y cada una alimenta bacterias diferentes.
Además del alto contenido de fibra (que nos ayuda a sentirnos satisfechos más tiempo) las manzanas contienen radicales libres que pueden ayudar a aliviar las alergias y apoyar el sistema inmunológico. Por último, las manzanas son una buena fuente de vitamina C, y una manzana mediana proporciona el 10 % del valor diario. ¡El perfecto snack de medio día!
Si estás buscando ayudar a tus bacterias intestinales y a tu metabolismo, una manzana es ideal. Recuerda acompañar tu snack con Wellaid, ideal para apoyar a tu sistema inmunológico y Happibelly, que ayuda a tu sistema digestivo.
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